Jacinto Benavente Martínez (Madrid, 1866 - 1954) es uno de los pocos autores españoles que tienen un premio Nobel, otorgado en 1922, lo cual ya aporta a su currículum un esplendor mayor. Dramaturgo, cineasta... dejó un gran número de obras en las que, algunas veces según dicen sus críticos, no llega a ahondar tanto como podría haberlo hecho y la denuncia de aspectos como la manipulación de las informaciones, el papel de la mujer, la modernidad o la situación política, no llegan a cuajar suficientemente. De hecho, sus variaciones entre las diferentes opciones que conoció a lo largo de su vida, le hacen estar siempre al lado del que gobierna, desde Primo de Rivera durante la Dictadura blanda, la República durante la Guerra Civil o loas al franquismo tras su victoria final, y sin embargo, durante muchos años posteriores al 39, tuvo que representar sus obras citándolas no con su propio nombre sino por "el autor de la Malquerida". Sin embargo su fama es total, debida a la popularidad de sus obras, pero también a su cantidad: teatro, versos, novelas, críticas, adaptaciones, guiones...
Comedia en tres actos publicada en el número 59 de la colección de Teatro La Farsa. Estrenada con la protagonista representada por Margarita Xirgú en el Teatro Fontalba de Madrid, el 10 de marzo de 1928, año de la edición de este librito que se llena de caricaturas de los personajes.
Problemas de la alta sociedad o como se decía en un tiempo pasado, de la "jet-set". Valeria se quedó viuda de repente y con un hijo, lo malo es que el accidente que le quitó a su esposo también descubrió que tenía una doble vida, aunque aparentemente lo ha superado, la desatención del niño que acusa la falta de la figura paterna, demuestra lo mal que lo ha pasado. Necesitará de una persona muy especial que pondrá algo de sentido en el niño y en el círculo familiar que, por su posición social y económica más el desastre sufrido incluida la sorpresa de la doble vida, permanece en una nube de negación absoluta. El ambiente tan hostil lo percibe el pequeño como un desprecio, falto de atención, se vuelve rebelde y revoltoso hasta extremos insoportables. El recién llegado, Alberto, como educador del niño se lo advierte, si quieren que el niño cambie, toda la familia tiene que hacer un esfuerzo por recomponerse y no tratarle con lejanía, el crio necesita mucho cariño. Y así el niño se convierte en el centro y la paz y el amor de la familia generará la posibilidad de salir adelante. Benavente una vez más, ahonda en los problemas de las personas corrientes y mezcla un tema de clases sociales para darle más sabor al asunto, pues a nadie se le escapa que la sequía del corazón que abunda en Valeria es reflejo de la sequía de cariño que demuestra a su hijo, vencido uno, aparece el otro.
@ 2022, by Santiago Navas Fernández