Con el número 7 recibimos otra obra de José López Rubio, estrenada 14 de noviembre de 1951 en el Teatro de la Comedia de Madrid, dirigida por Edgar Neville, dividida en tres actos que suceden en el mismo escenario y de forma continua, los entreactos sólo sirven para descanso del personal. José López Rubio (Motril, 1903 - Madrid, 1996) fue un dramaturgo e historiador teatral, director de cine incluso contratado por la Metro Goldwyn Mayer y la FOX, guionista, periodista humorístico que colaboró en numerosas revistas de la época aunque también en periódicos más serios, miembro de la generación del 27, viajero infatigable estuvo mucho tiempo fuera, entre América y España, y posteriormente, guionista en Tve en los programas "Al filo de lo imposible" (1970) y "Mujeres insólitas" (1977). Tendremos ocasión de leer obras suyas de Teatro, pero también podéis ver sus películas que son en buena parte públicas y de títulos tan famosos como "La malquerida" (adaptación de la obra de Benavente), "El crimen de Pepe Conde" (premio 1946 como Mejor argumento original), etc. Acabó siendo nombrado como sillón ñ de la Real Academia Española donde accedió con un discurso sobre "la otra generación del 27" referida a aquellos escritores humoristas que quedaron relegados por considerarse muchos años un género menor, entre los que se encontraban Tono, Mihura, Jardiel Poncela, Neville, etc.
Un hombre adinerado decide convocar a través de la prensa, una cena gratis para todo aquel que se encuentre sólo en la ciudad la noche de nochebuena. Los requisitos son que esté sólo o sola y que no tenga familia. Todo está preparado cuando se alza el telón en un restaurante de un hotel en el cual él es el dueño. Pero si el triunfo fuera la gran asistencia de personas, a poco está en vías de ser un fracaso porque sólo aparece una persona, tímida, que no se queda porque le da miedo que todo sea un truco comercial. Sin embargo, el que ha creado la cena, dueño del Hotel, tiene un fin muy claro que nada tiene que ver con lo que ni éste ni ningún otro invitado suponen ¿o tal vez sí? Al final aparecerá una hermosa mujer, un comerciante que se escapa de casa para acudir y olvidarse de su familia y una mujer abandonada, entre algún que otro transeúnte. La charla y el intercambio de confidencias se inicia con animación. El dueño del Hotel se inclina por la dama joven y hermosa que cuenta las numerosas infidelidades de su esposo, al que ha dejado hace nada de tiempo, y... bueno, hay que verlo y llegar al final para comprender el por qué. No olvidemos que es una comedia.
@ 2002 by Santiago Navas Fernández