Keith Luger es uno de los seudónimos de Miguel Oliveros Tovar (La Coruña, 17/03/1924 - Madrid, 16/11/1985) un escritor español que utilizó también el sobrenombre de Bronco Mike, Miguel Romano y Jay Kanata, en función de la temática que abordada, con más de mil novelas cortas y seis guiones de películas, predominan las del Oeste, ciencia ficción, policíacas, de terror y románticas. Hijo de militar, estudió para criminalista, sin embargo sacó plaza de funcionario en el Ayuntamiento de Valencia. En 1951 crea una editorial para editar sus primeras novelas ilustradas por su propio hermano, poco después le contrata Bruguera para diferentes colecciones y pide excedencia, acabará renunciando a la plaza y dedicándose a la escritura hasta su fallecimiento. Juan Alfonso Gil Albors (Alcoy, 06/03/1927 - Valencia, 14/02/2020) fue un dramaturgo, gestor cultural y periodista español, su vida transcurrió en Valencia dedicándose al periodismo primero y luego a la creación de obras o el trabajo en los teatros valencianos recibiendo varios premios por sus obras y como reconocimiento a su carrera, con más de cuatro decenas de títulos propios.
El número 459 de la colección teatral Alfil nos trae esta Comedia dividida en dos actos, el primero dividido en dos cuadros, que se estrenó en el Teatro Alcázar de Madrid el 22 de diciembre de 1964. El librito contiene dedicatoria de los autores al primer actor y una biografía breve de cada uno, al dorso.
Novela/teatro de carácter policíaco con cadáveres varios que van sucediéndose y aumentando el misterio hasta que la longitud lógica de una obra así, exige una resolución cuanto antes. El amor, los celos y una trama increíble, se conjugan en el escenario para arrastrar a un joven matrimonio compuesto por una temerosa esposa y su esposo, doctor en medicina, a recibir un muerto en su casa el cual cree cada uno que lo ha matado el otro, por lo que buscan protegerse. Pero no será el único personaje que tenga su estelar aparición y luego aparezca asesinado o asesinada, así que el misterio crece y resulta imposible ocultar tanto cuerpo. Como siempre ocurre, nada es lo que parece, así que ni la policía es quien es, ni el sheriff se entera de nada. Un lío con situaciones más sorprendentes que cómicas, que llenan la trama de entretenimiento.
@ 2024, by Santiago Navas Fernández