jueves, 3 de agosto de 2023

EL ALCALDE DE ZALAMEA.


Pedro Calderón de la Barca (Madrid, 1600 - 1681) fue sacerdote miembro de la Venerable Congregación de Presbíteros Seculares Naturales de Madrid San Pedro Apóstol, caballero de la Orden de Santiago, pero nada de eso le hizo famoso sino ser uno de los más insignes literatos del Siglo de Oro. Proveniente de familia noble de arraigo cántabro, recibió estudios superiores y se introdujo en el mundo literario gracias a su cultura y predisposición, su producción dramática consta de ciento diez comedias y ochenta autos sacramentales, loas, entremeses y otras obras menores, siendo el suyo la culminación del teatro barroco nacido con Lope de Vega. Sus títulos gozan de actualidad y son muy conocidos, en particular "La vida es sueño", "El médico de su honra", "El mágico prodigioso", "El alcalde de Zalamea", El gran mercado del mundo", "El gran teatro del mundo", "La dama duende", "Casa con dos puertas, mala es de guardar", etc. 

El número 215 de la colección de Teatro Alfil está declarado como EXTRA por contener una obra clásica, en el librito se explica por parte de la editorial que debido a la solicitud de muchos suscriptores se van a editar en cada extra, clásicos del Teatro. Además suma una breve introducción y el parte trasera, una biografía de don Pedro.

Se trata de un drama dividido en tres actos y en verso. Los estudiosos dicen que hubo una representación en Palacio de esta obra hacia 1636, el 12 de mayo. Y que esta de Calderón es una versión de refundición del verdadero drama que escribió Lope de Vega, siendo el de don Pedro titulado en un principio "El garrote más bien dado", adquiriendo el definitivo que conocemos tras una refundición de obras suyas realizada por Juan de Vera Tassis y Villarroel, encargado de componer la Séptima Parte de comedias del célebre poeta español Don Pedro Calderón de la Barca (1683). Y así ha pasado a la historia, según dicen los entendidos.

En la localidad extremeña de Zalamea de la Serena vive un acaudalado agricultor que aloja al capitán de las tropas española que van hacia Portugal, don Álvaro Ataide, de extracción noble y con la suficiente arrogancia como para ser tan descortés con su anfitrión como para secuestrar y violar a su joven hija. Don Pedro Crespo, el agricultor, clama venganza, pero le ofrece al noble una salida, recibir todos sus bienes si acepta casarse con la muchacha para reponer su agravio, pero el capitán los considera villanos no dignos de su clase. En eso que la familia y vecinos apoyan a su vecino y le nombran alcalde, tras lo cual don Pedro ordena prender y juzgar al capitán, condenándole "al garrotazo". Tras ello, el rey don Felipe tiene conocimiento de los sucesos y tras conocerlos ratifica la condena y el castigo y para ser más ejemplar, nombra alcalde perpetuo de Zalamea a don Pedro.

Historiadores han sugerido que no era Zalamea de la Serena, sino Zalamea la Real en Huelva por una serie de indicios y personajes, pues una parte de ellos es real y contrastable, incluso en este caso podría ser Felipe II quien acudió por otros motivos y se detuvo en esta segunda población donde presuntamente ocurrieron los hechos. El nombre del capitán es real, pero hay dudas que no sea una casualidad. El caso es que Lope apuntaba a esta segunda Zalamea, más cercano a los hechos por ser su versión anterior, mientras Calderón, optaba por la Zalamea extremeña aunque confiesa que son hechos verídicos. En cualquier caso, la obra exalta los valores de la Justicia, del honor, del amor paterno y de la solidaridad de todo un pueblo con un vecino frente a la arbitrariedad de la nobleza.


@ 2023, by Santiago Navas Fernández.

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